Tecnocasa ha desaparecido de nuestras calles, de nuestras escuelas, de nuestras vidas.
Cómo es possible que esta gran empresa nacida en Milan haya dejado escapar a dos magnificos comerciantes , que no comerciales, de sus fila.
Abel Ramos: Dedicacion exclusiva a la empresa durante su estancia, sin resultados aparantes, pero mucha dedicacion.
Andres Quiñonero: Dedicacion exclusiva durante un mes, el resto de tiempo, sentao en el banco.
I por último se va Xavi, el kironero; donde esta llegando Tecnocasa.
Donde estamos llegando en el mundo de la immobiliaria, ya no se valora nada.
Suerte que siempre quedará el Bar La Patata.
El inglés